La comunicación efectiva es más importante que nunca.
El trabajo ha cambiado, y todos pasamos más tiempo con videos. Pero las reuniones aburridas, la atención dispersa y el pensamiento obsoleto se interponen en el camino.
Por eso hicimos mmhmm.
Nuestra historia
El trabajo remoto era pésimo.
¿Recuerdas el caos de 2020? Claro que sí. Al igual que la mayoría de las otras empresas, nuestro equipo de All Turtles tuvo que adaptarse para estar completamente distribuido, todo el tiempo. Nos encantó el equilibrio y las posibilidades que generaba trabajar desde cualquier lugar. ¿Pero pasar todo el día en videollamadas? No tanto.
Cabezas en recuadros, despojadas de individualidad. La incómoda danza de compartir diapositivas. Hacer que todos elijan entre mirar esas diapositivas o ver al orador. No solo era tedioso: era ineficaz. Le quitaba la vida al trabajo.
Entonces hicimos que las reuniones sean más divertidas. Y útiles.
mmhmm nació como un entretenimiento. Poder moverte por la pantalla, cambiar el fondo o compartir el espacio de la pantalla con nuestras diapositivas fue una forma divertida de animar una reunión. Y cuanto más jugábamos con mmhmm, más nos gustaba.
La energía aumentó. La atención y el compromiso subieron. Controlar lo que estaba en pantalla hizo que fuera más fácil señalar las cosas que importaban. Nos dimos cuenta de que mmhmm podría hacer que el video en línea sea una mejor experiencia para todos.
Unos meses después, mmhmm estuvo en fase beta, con 100 000 personas en lista de espera. Resultó que muchas personas necesitaban una forma más fácil de presentar, informar o entretener en video. Y al hacer que mmhmm fuera compatible con los sistemas que ya utilizaban (como Zoom, Google Meet, Microsoft Teams y Webex), de repente, las mejores reuniones estaban al alcance de todos.
Pero entonces ocurrió algo sorprendente.
A medida que nuestro equipo distribuido creció, crear una herramienta para un trabajo más inteligente y eficiente nos llevó a reimaginar cómo debería suceder el trabajo. Descubrimos que tener mejores reuniones significa tener menos reuniones y que algunas cosas que tradicionalmente se hacen cara a cara funcionan mejor en video.
La mayoría de las reuniones son un mal uso de un tiempo valioso. ¿Por qué obligar a todo el mundo, a través de múltiples zonas horarias, a reservar la misma hora en sus agendas simplemente para escuchar hablar a una persona? ¿No sería mejor cancelar la reunión y grabar la presentación como un video? Entonces todo el mundo puede verla a cualquier hora y a la velocidad que le funcione mejor.
Hoy, cuando nos reunimos en tiempo real, no se trata de verter información. Se trata de actuar. Las reuniones presenciales, el momento más valioso y costoso de todos, son para construir relaciones que nos hagan más eficaces como equipo. Gracias a mmhmm, tenemos más control sobre nuestro tiempo, tenemos reuniones más significativas y transmitimos información de manera más eficiente. No solo hemos sobrevivido al trabajo distribuido, sino que lo hemos adoptado de forma permanente.
Todo eso a partir de un truco de fiesta.
“No intentes recrear el viejo mundo. Imagina lo que puede ser”.
— Phil Libin, CEO y cofundador de mmhmm
Seis cosas en las que creemos
El trabajo híbrido llegó para quedarse. Los equipos exitosos pueden pasar del trabajo en vivo al trabajo asincrónico y viceversa, sin problemas.
Las malas reuniones matan el buen trabajo. Es difícil decir algo (o escuchar lo que se dice) si estás cansado y aburrido.
La comunicación visual es más eficaz, sobre todo cuando el orador puede literalmente señalar lo que importa.
Menos reuniones conducen a mejores conversaciones, lo que cambia el enfoque hacia decisiones informadas y conseguir que se hagan las tareas.
La mejor manera de crear un producto es en una cultura de alta confianza en la que todo el mundo se sienta responsable y tenga impacto.
Es hora de pasar de estar en video por obligación a estar en video por elección.
Pero, ¿a qué viene ese nombre?
Creemos que es importante tener un nombre que se pueda decir mientras se come. Siguiente pregunta.
Hablando en serio... di el nombre. Dilo varias veces. Adelante, nadie está mirando.
“mmhmm” es un sonido que haces todo el tiempo sin pensarlo. Pero cuando lo dices intencionalmente, hay una pequeña pausa. Tienes que decidir cómo decirlo. Tienes que actuarlo.
Y ese es el secreto de toda comunicación. No son solo las palabras que dices, es la forma en que las enmarcas, el tono que usas y cómo las presentas. mmhmm te ofrece las herramientas y el control necesarios para ofrecer la información de la forma que desees: desde el fondo hasta la apariencia y qué contenido se muestra dónde.
También puedes decirlo mientras comes.